Se acercan las navidades y los peques de las casas empiezan a pedir montones y montones de juguetes. Estaría bien enseñarles que no todo lo que nos entretiene son los juguetes, sino que también podemos pedir otro tipo de regalos como.. LIBROS. Y es que en las aulas de infantil sabemos lo mágico que puede resultar el momento de contar un cuento.
Hoy, queremos dejaros una serie de libros que nos parecen maravillosos ya sea por las ilustraciones que tienen, por los valores que intentan transmitir... y os animamos a que vuestros hijos incluyan alguno de ellos en la carta a los Reyes Magos ;-)
La cebra Camila: Un día de mucho viento, la cebra Camila
pierde sus rayas. Los amigos que se va encontrando en el camino le ayudarán a
solucionar su problema. Un cuento en verso para encandilar.
A qué sabe la luna: Hacía mucho tiempo que los animales deseaban
averiguar a qué sabía la luna. Hasta que, un buen día, la pequeña tortuga
decide subir a la montaña más alta para poder tocarla. Y aquí empezó todo.
Llamó al elefante, a la jirafa, a la cebra... para que le ayudaran a
intentarlo. ¿Quieres descubrir a qué sabe la luna? Un libro que despierta la
imaginación, ayuda a reconocer a diferentes animales y desarrolla valores tan
importantes como la amistad y la perseverancia.
La pequeña oruga glotona: Una pequeña oruga nace de un
huevo, y tiene mucha hambre. ¿Qué comerá? Una historia creativa y divertida
sobre el proceso de crecimiento de una mariposa.
El pollo Pepe: Un cuento troquelado de vivos colores, con
efectos de tres dimensiones, que nos cuenta lo grande que es el pollo Pepe.
Elmer: Elmer no es como los otros elefantes de su manada.
Aunque parezca difícil de creer, es un elefante de mil colores: verde, azul,
blanco, rosa, amarillo... ¡Impresionante!, ¿verdad? Pero a Elmer no le hace ni
pizca de gracia ser así, más bien está harto de ser distinto, así que un día
decide escaparse de la manada y buscar un remedio para poder tener el mismo
color de piel que los demás...
Lolo, un conejo diferente: Lolo es un conejo diferente al
resto pues tiene una oreja caída. Los demás siempre se ríen de él y Lolo
intenta, sin éxito, que su oreja esté recta. Un día Lolo decide ir al
médico y este le dice que todas las personas tienen orejas diferentes y
que las suyas son tan buenas como las de los demás. Entonces Lolo se siente
mucho mejor y propone un juego a sus amigos. Un cuento que enseña a los
niños que ser diferente no es malo y que todos somos diferentes.
Vamos a cazar un oso: Basado en una canción infantil, este
cuento trata sobre el paseo que una familia compuesta por un padre y tres hijos
llevan a cabo en busca de un gran oso. El viaje comienza muy positivo y lleno
de energía; niños y padre no temen a ningún obstáculo, muy por el contrario,
los sortean exitosamente dando paso a un juego de sonidos divertidos que imitan
sus pasos en la naturaleza y que hará que los niños participen en la lectura
del cuento: "suish suash", atraviesan el pasto, "glo glo
glorogló", cruzan el río nadando. Como la canción, este cuento contiene
rimas y repeticiones que invitan a un juego en donde los niños pueden anticipar
y decir con emoción la parte que viene, como por ejemplo: "por arriba no
podemos pasar / por debajo no podemos pasa / Ni modo... la tendremos que
atravesar". La parte lúdica de la lectura también se compone por dos
estados anímicos del cuento, la primera parte es tranquila y los personajes van
con gran actitud en busca de una aventura; pero cuando aparece el oso el ritmo
cambia y se acelera, imitando la carrera que el padre y sus hijos hacen a toda
velocidad para arrancar del oso y esconderse bajo las cobijas de la cama. Este
libro es y ha sido un favorito de niños, padres y profesores en especial por la
posibilidad de una lectura en voz alta llena de diversión y participación de
todos.
La casa de Tomasa: La casa de Tomasa es pequeña y cómoda,
perfecta para ella y su gato. Pero Tomasa acoge a toda la gente que llega y, a
medida que amplía la casa, hay menos espacio para ella y el gato! Abre las
ventana...
El topo que quería saber quién se había hecho aquello en su
cabeza: Todo empezó cuando el topo asomó la cabeza por su madriguera y le cayó
en su cabeza aquello (gordo y marrón, que se parecía a una salchicha). De mal
humor se dispuso a buscar al culpable ¿pudo hacerlo una paloma? ¿Tal vez una
vaca? ¿Encontrará el topo finalmente a quién lo hizo?
Cuando a Matías le entraron ganas de hacer pis la Noche de
Reyes: He aquí una divertida historia sobre cómo los nervios te pueden jugar
una mala pasada, incluso a edades tan tempranas como los 4 ó 5 años. El pequeño
Matías les ha pedido a los Reyes un tren con vagones de colores y, aunque se
muere de ganas de conocer a sus Majestades, la noche de autos, le advierte su
padre: "Los Reyes no dejan juguetes a los niños que están
despiertos". Obediente, deja preparado un tentempié para Reyes y camellos
y se va a la cama. Pero, a medianoche, se depierta con tremendas ganas de ir al
baño. El pobre Matias no puede más e intenta avanzar sigiloso, pero "el
pis hizo ruido, mucho, mucho, mucho ruido", y así, con lagrimas en los
ojos regresa a su cuarto pensando que, a la mañana siguiente, solo va a
encontrar carbón
¿Por qué, mamá? Osito sabe muchas cosas. Sabe dónde se
esconden los peces más deliciosos y cómo pescarlos. Sabe cómo deslizarse por
una colina sin hacerse daño, etc. Pero algunas cosas no las comprende bien. Por
ejemplo, de dónde viene la nieve. Osito le pregunta a su mamá. Sin embargo, la
respuesta a la pregunta más importante sí que la sabe. Sabe que su mamá le
quiere muchísimo porque es su hijo